Arranca febrero y parece que hubieran pasado muchos meses de este 2021, ¿no tenéis la misma sensación? Y al mismo tiempo, casi fue ayer cuando desde WOP arrancaba nuestra campaña de Navidad llena de proyectos y, sobre todo, de ilusión.

En estas primeras semanas del año hemos analizado todas estas acciones mientras seguimos trabajando en todo lo que está por llegar. Y entre las conclusiones que hemos ido sacando hay una palabra que resalta entre otras: ILUSIÓN.

Desde WOP no es nuevo. Valores como el esfuerzo, la superación, el trabajo en equipo… con esperanza, ilusión y optimismo mueven nuestro trabajo desde que este proyecto arrancase hace más de diez años. Y hoy, más que nunca, todo ello ha ido cobrando aún más importancia.

Lo estamos constatando desde hace ya casi un año (cuando esta pandemia mundial nos llegó). Cada día las personas necesitamos pequeños destellos de ilusión que nos dan fuerza para seguir caminando. Y bajo estos pensamientos dimos forma a nuestra campaña de Navidad con varias acciones entre las que ha destacado el reto de crear, entre todos, el mayor árbol de Navidad del mundo. ¿Te acuerdas? Una acción que además sumaba minutos de lucha contra las enfermedades neurodegenerativas.

Ha sido muy emocionante leer cada uno de vuestros mensajes en ese gran árbol virtual. Deseos llenos de esperanza, fuerza y optimismo. Y desde WOP os estamos muy agradecidos por vuestro apoyo y respuesta a esta acción en la que todos y todas hemos sumado. Porque como decíamos en este reto: “Haciendo piña se consiguen grandes cosas”. Y si además cada frase os ha podido ayudar a cargar en la mochila un poco de ilusión, entonces el éxito es todavía mayor.

Nuestra Navidad estuvo muy centrada en esta acción, repartiendo también horas para atender la tienda temporal que teníamos en Bilbao, los pedidos de la tienda online (que en esas fechas se multiplican), la logística de nuestra primera carrera virtual Bota Pinue! y la organización de la décima edición de nuestro WOP Festival. ¡Ya ves que no nos faltó entretenimiento!

Y una vez más, y ahora desde la distancia, vemos que la ilusión estuvo presente en cada movimiento. Ilusión por regalar, por hacer deporte, por evadirse, por retomar (aunque fuera de forma diferente) muchas rutinas que antes dábamos por sentadas. Porque ¡qué ganas de vivir la música pudimos ver en nuestro festival! Desde WOP no fue fácil organizar este evento en un año tan complicado. Sabíamos que no sería nada parecido a otras ediciones. Con todo, apostamos por ello y finalmente se celebró con todas las medidas necesarias en un espacio que nos brindaba todas las garantías, como fue el Palacio Euskalduna de Bilbao. ¡Y qué noche!

Sin duda fue una edición emocionante para el público y para las propias bandas. Incluso los músicos lo han afirmado en alguna entrevista. Sonic Trash lo recordaba hace muy pocos días: “El concierto del WOP en Euskalduna fue un verdadero chute”. Eskerrik asko!

Pues sí, “chute” de energía, de fuerza y de ilusión por lo que está por llegar.

Todo el equipo WOP trabajamos cada día con esos valores en un año en el que seguiremos creciendo y en el que surgirán nuevas oportunidades y proyectos que se unirán a nuestro principal objetivo: la lucha contras las enfermedades neurodegenerativas.

Por la salud, la investigación y la ciencia. Gracias a todas las personas que os habéis sumado a nuestras acciones y todas las que dais impulso a este proyecto siendo amigos y amigas WOP.

Walk On!